Como uña y carne

Hace ya tiempo que está de moda lo de pintarse las uñas de una manera original.
Cuanto más extraña, elaborada y colorida sea la filigrana mucho mejor. Hasta el punto de que la manicura empieza a convertirse en una especializacíon artística. Yo soy poco cuidadosa en ese aspecto. Perezosa más bien, y se me hace un mundo dedicarle una hora a quitar cutículas, limar, pulir, abrillantar y pintar. No tengo paciencia.

Eso de ir al supermercado, elegir un color bonito a juego con los labios o el vestido ya pasó a la historia ahora nos adentramos en el mundo del arte creativo de la manicura, no apto para las que nos dedicamos a darle al estropajo y la sarten, para las demás aquí una selección.