El rincón de los trastos: Vuelta al cole

¡Ya llegó la vuelta al cole! El lunes empezó en la mayoría de las comunidades y hoy aquí en Cataluña. Un curso escolar que empieza con bastantes incertidumbres, demasiados cambios, menos maestros y más alumnos ¡Party Hard!

El desastre está asegurado. En este país de pandereta funcionamos así. En lugar de financiar la educación financiamos a los bancos. Con lo cual el recorte de 3000 millones de euros en la educación nos va a tocar a todos. El que no tienen hijos tiene sobrinos, nietos, hermanos o vecinos.

Pero no os preocupéis que tendremos representación parlamentaria porque, que yo sepa lo de los recortes al hemiciclo no ha llegado. No tengo noticia de que se haya despedido a ningún diputado por reducción de personal. Sin embargo 50.000 profesores interinos se han quedado en la calle. Es que claro, es mucho más importante darle vueltas a la crisis porque sus señorías que son muy cultos tienen mucho que leer y estudiar para dar con la clave correcta para salvarnos de este apocalipsis. Algo que quizás nuestros hijos no puedan hacer cuando les toque, porque con estas ratios de alumnos por aula, si tienes suerte y tu hijo es de los listos puede que aprenda lo suficiente. Pero como tenga un poco de dificultad para aprender, un poco de dislexia, déficit de atención o algún tipo de dificultad… más vale que te encomiendes a algún santo de tu confianza, y si no eres creyente pues date por perdido.

Si tu hijo va para banquero ningún problema, pero si lo que le mueve es la vocación de enseñar, ser bombero, enfermero, policía o funcionario ¡VADE RETRO SATANÁS! Quítale esas ideas diabólicas de la cabeza que vas a tener un nini hasta el fin de los tiempos. Porque la nueva definición de nini para estos tiempos de crisis es: ni cobras, ni trabajas ni lo harás en la puñetera vida.

Pero en realidad la entrada de hoy iba sobre la polémica de los comedores escolares, aunque aún no se tiene claro si los niños podrán llevar tuper, si no, si habrá que pagar porque lleven el tuper, o será gratis, o en algunos sitios sí y en otros no. A todo esto el cole ya ha empezado. El niño no sabe si comer o no comer, porque aún no hay consenso. Las madres estamos hartas de ir recalentando las lentejas, a ver si se deciden. ¿Es posible que de una buena vez se hagan las cosas bien? ¿Es justo que un crío de seis años tenga que ir con la fiambrera fría al cole porque sus padres no pueden mantener el gasto que supone un comedor escolar y aún así tengan que pagar una media de 50€ al mes llevando su propia comida?

Con este panorama no me extraña que al final los padres desesperados acaben lanzándoles los tupers a la cabeza del político que se les ponga más a mano, la próxima vez que se lo lancen que esté lleno de garbanzos a ver si así aciertan. Estoy al 100% con esos padres desesperados e indignados ante el inicio de este curso escolar. Entre los libros, la subida del IVA implacable en el material escolar que es un autentico asalto a mano armada, los gastos varios que genera el comienzo de curso en batas, uniformes, ropa, calzado (y es que los niños crecen, eso es algo de lo que no te libras por más que quieras) y la supresión de la mayoría de becas escolares los números no salen. Tampoco hay subvenciones para los desplazamientos, o sea que si vives en algún sitio alejado de la escuela ya puedes levantar a tu hijo de madrugada si quieres que llegue a tiempo a clase. Y cómprale unos patines y que haga deporte de buena mañana porque de llevarlos en coche ya te puedes ir olvidando como no te toque la bonoloto para comprar gasolina. Sin contar las actividades extraescolares, que este año me temo que muchos de los niños no las podrán realizar por falta de presupuesto familiar. Supongo que esto no debe de afectar directamente a los hijos de ningún diputado, pues si esto les tocase de cerca ya se habrían tomado medidas.

Con todo esto el inicio escolar no es que se presente como “la cuesta de septiembre”, si no que ya es la escalada al Everest en plena tormenta y sin bombona de oxígeno. Jugar con el futuro de nuestros hijos es un mal juego y creo que el que reparte las cartas hace trampas.